La colección ha sido creada con la intención de replicar una superficie metálica tratada con pintura en polvo. El acabado tiene una microestructura con un tacto granulado, propio de la laca que reproduce, lo que le confiere muy buena resistencia al rayado.
A esto se suma un brillo poco común y un efecto micáceo, debido al uso de tintas metálicas en la impresión de los decorativos. Polvere se produce en una amplia paleta de colores, el resultado sorprende tanto en los tonos claros como en los oscuros, todos caracterizados por una fuerte homogeneidad de impresión, lo que los hace combinar bien con otros materiales. La colección es un producto técnico y elegante, que enriquece el mueble o el mobiliario sin impactar en ellos.